USD/CAD en Medio de Tensiones Comerciales y Diferentes Políticas Monetarias
Canadá es el segundo socio comercial más importante de Estados Unidos después de México, con un comercio bilateral total que alcanzó los 770 mil millones de dólares en 2024. De este monto, 422 mil millones correspondieron a exportaciones estadounidenses y 349 mil millones a importaciones, generando así un superávit comercial para Estados Unidos de 73 mil millones de dólares. Canadá, Estados Unidos y México operan bajo el marco del T-MEC (USMCA), que entró en vigor en julio de 2020 para reemplazar al TLCAN y reforzar la integración continental mediante un mayor acceso a mercados, normas laborales más estrictas y una protección de la propiedad intelectual más robusta en toda América del Norte y Central.
Dado este nivel de interdependencia económica, no sorprende que el anuncio de principios de año del presidente Trump sobre la imposición de amplios aranceles —25% sobre la mayoría de las importaciones a partir del 4 de marzo, 10% sobre productos energéticos y la reactivación de los aranceles al acero y al aluminio desde el 12 de marzo— haya desencadenado un fuerte enfrentamiento comercial, con Canadá imponiendo medidas de represalia sobre hasta 155 mil millones de dólares en bienes estadounidenses. Las medidas redujeron drásticamente los flujos bilaterales de bienes, que cayeron un 12.5% interanual hasta octubre, después de un repunte inicial vinculado a compras anticipadas. El transporte transfronterizo por carretera aumentó un 50% en enero-febrero (especialmente en rutas como Toronto–Chicago), las tarifas de flete subieron un 10% y los envíos exprés se duplicaron a medida que las empresas acumulaban inventarios antes de la entrada en vigor de los nuevos aranceles. En contraste, los cruces fronterizos de vehículos particulares disminuyeron un 20% entre enero y octubre, presionando intensamente a los sectores automotriz, metalúrgico y energético, todos altamente vinculados a las reglas de origen del T-MEC.
Asimismo, la divergencia en política monetaria se ha acentuado. El Banco de Canadá —que se reunió ayer en paralelo con la Reserva Federal— mantuvo su tasa de referencia en 2.25%. La institución había iniciado un ciclo agresivo de relajación monetaria en junio de 2024 desde un nivel máximo del 5%, pero recientemente decidió hacer una pausa ante señales de recuperación en el mercado laboral, con la tasa de desempleo bajando a 6.6%, y una desaceleración constante del IPC hasta 2.2%, acercándose al objetivo oficial. Por su parte, la Reserva Federal recortó su tasa en 25 puntos básicos ayer. Corresponde ahora analizar cómo estos acontecimientos han afectado al tipo de cambio USD/CAD y qué cabe esperar hacia adelante.
ANÁLISIS TÉCNICO
El par ha reflejado con precisión las dinámicas políticas y macroeconómicas subyacentes en su acción del precio. El dólar canadiense se debilitó desde 1.3419 en septiembre de 2024 hasta un mínimo de 1.4560 en enero, impulsado por el ciclo de relajación monetaria del Banco de Canadá. Posteriormente recuperó terreno de manera significativa, llevando al USD/CAD a descender hasta 1.3566 en junio de este año, a medida que la menor demanda de dólares estadounidenses se traducía en una depreciación del billete verde. Tras aproximadamente un mes de consolidación, el dólar estadounidense reanudó su avance el 23 de julio, y el par se movió dentro de un canal alcista bien definido. Sin embargo, esta estructura se quebró el 5 de diciembre cuando —en anticipación a las decisiones de política monetaria anunciadas ayer— la tendencia fue perforada a la baja en 1.3956. El cierre de ayer se ubicó en 1.3790.

En un horizonte de largo plazo, la zona de 1.3850 representa un nivel crítico, dado que el USD/CAD ha oscilado mayormente entre este nivel y 1.2520 desde aproximadamente 2015. Considerando este comportamiento, junto con unas tensiones comerciales que no parecen próximas a desaparecer y una economía canadiense que muestra una resiliencia subyacente sólida (particularmente en el sector consumidor), el sesgo favorece una continuación del movimiento bajista en las próximas semanas. Entre los niveles clave a monitorear destacan inicialmente 1.3725 y 1.3575. Más abajo, la región de 1.3430 también resulta relevante. Naturalmente, este análisis se refiere a un horizonte de mediano a largo plazo, probablemente avanzando hacia inicios de 2026.
